Desde las zonas
rurales se está diciendo que la desescalada no puede ser igual en ciudades y en
pueblos. Los pueblos deberían ir pasando de fase antes que las ciudades.
Por otra parte se está empezando a hablar que gracias "desgraciadamente" a esta pandemia las zonas rurales van a entrar en un nuevo horizonte más positivo. En este artículo se ofrece dos escenarios, el actual y el previsible de las zonas rurales.
ESCENARIO ACTUAL.
La pandemia provocada por el Covid-19 está
provocando en la actualidad cambios sustanciales en la economía y en la
sociedad. Algunos de estos cambios son estrictamente negativos como es la
generación de otra crisis económica a pocos años de la recuperación de la que
comenzó en 2008, debido al paro obligatorio y la situación de incertidumbre en
la que nos encontramos.
Pero por otra parte se empieza a
vislumbrar cambios positivos sobre todo para el medio rural. Estos cambios son
los siguientes:
· Auge del
teletrabajo.
· Consideración de zonas rurales como
privilegiadas por estar rodeadas por espacios naturales y por tener en general
espacios de habitabilidad más grandes que en la ciudad.
· Consideración de ser
menor el peligro de contagio al no haber multitudes.
· Consideración de fortaleza de
la agricultura y la ganadería al ser sectores productivos esenciales para la
población.
· Se ha observado
la falta de industrialización en todo el territorio español para no ser tan
dependientes de otros países.
ESCENARIO PREVISIBLE.
El presente y el pasado se basan en
hechos, pero el futuro se basa en las hipótesis. Dado el escenario presente
podemos aventurarnos a describir el siguiente escenario previsible a corto y
medio plazo para zonas rurales:
· El teletrabajo
se ha convertido durante el estado de alarma en la única forma de trabajo de
muchos trabajadores. Se prevé que poco a poco los teletrabajadores vuelvan a
trabajar en sus empresas, pero muchas empresas seguirán apostando por el
teletrabajo para sus trabajadores a tiemplo completo o de forma parcial. Esto
puede provocar que más trabajadores apuesten por vivir lejos de la ciudad y
establecerse en zonas rurales.
· Por miedo a
futuras pandemias y confinamientos parte de la población buscará crear sus
proyectos de vida en zonas rurales.
· La agricultura
y la ganadería pueden tener un auge al ser sectores esenciales que puede
derivar a un aumento de población activa y ser objeto de inversión.
· La necesidad de
industrialización puede provocar el auge de pequeños polígonos industriales en
zonas rurales.
· La crisis económica que se
está generando provocará que muchos trabajadores desempleados con raíces en
zonas rurales apuesten por volver a ellas, tal y como ya pasó en la crisis de
2008.
· Personas mayores, población
de alto riesgo, también optarán por residir a tiempo completo en las zonas
rurales.
· El turismo a
otros países se verá muy afectado y tardará en volver a despegar. Incluso el
turismo nacional de aglomeraciones como el de Sol y playa o el de grandes
ciudades se verá afectado por miedo a la infección. Esto provocará que el
turismo rural o de interior crezca a niveles que nunca se han visto.
El futuro contestará, pero que estemos todos para verlo.